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Finca Valdelapiedra: Un rincón agrícola en un entorno lleno de historia y naturaleza
Situada en el paraje Valdelapiedra, dentro del término municipal de Valdefinjas, enclave de Toro, provincia de Zamora (España), Finca Valdelapiedra es mucho más que una explotación agrícola: es un espacio donde la tradición, la sostenibilidad y la belleza natural se entrelazan. Dentro del área de influencia de la histórica ciudad de Toro, reconocida por sus viñedos y su vega, nuestra finca se extiende sobre un paisaje ondulado, lleno de vida y rodeado de vistas únicas.
Un paisaje de belleza única
Situada en el paraje Valdelapiedra, dentro del término municipal de Valdefinjas, enclave de Toro, provincia de Zamora (España), Finca Valdelapiedra es mucho más que una explotación agrícola: es un espacio donde la tradición, la sostenibilidad y la belleza natural se entrelazan. Dentro del área de influencia de la histórica ciudad de Toro, reconocida por sus viñedos y su vega, nuestra finca se extiende sobre un paisaje ondulado, lleno de vida y rodeado de vistas únicas.
El clima de Valdefinjas
El clima de Valdefinjas, es de tipo mediterráneo continentalizado, caracterizado por inviernos fríos con frecuentes heladas y días de nieblas, y veranos cálidos y secos. Las precipitaciones, generalmente escasas, en torno a los 400 mm anuales, se concentran en primavera y otoño, mientras que los meses estivales suelen ser áridos. Este clima posibilita un entorno apto para el cultivo de almendros, garbanzos, cereales,… adaptados a las condiciones de suelos pedregosos y bajas necesidades hídricas en base a las variedades empleadas. La amplitud térmica diaria en algunas épocas del año favorece la calidad y características únicas de los productos agrícolas de la región.
Un refugio para la biodiversidad
El paisaje de Finca Valdelapiedra está vivo. Además de la flora propia del entorno, como el tomillo, lavanda, romero o quejigos, la fauna cinegética terrestre y las aves son protagonistas clave en este ecosistema. Entre ellas destacan el milano real, el águila ratonera, cuervos, avefrías, alondras, rabilargos, mirlos, etc., que acompañan las tareas del campo con su presencia activa, sus cantos y control de especies invasivas como roedores o insectos.
La tierra de la vid y el vino
La finca se encuentra en el corazón de la región vitivinícola de Toro, cuyas tierras han sido cultivadas durante siglos para producir vinos de renombre mundial. Compartimos con esta región no solo el orgullo por su tradición agrícola, sino también un terroir excepcional que da carácter y autenticidad a cada uno de nuestros productos.
Nuestras tierras se caracterizan por una equilibrada textura del suelo que garantiza una fertilidad óptima en secano incluso dada la característica caliza de la roca superficial de la zona. Indudablemente las vaguadas atesoran mejor calidad de suelos aunque con gran presencia de cantos rodados en algunas partes de la finca.
Cultivos responsables y sostenibles
Nuestros almendros, de variedades de floración tardía, florecen entre finales de marzo y principios de abril, intentando sortear las heladas primaverales que caracterizan el clima de esta zona.
Junto a ellos, cultivamos garbanzos y cebada ecológicos, aplicando prácticas agrícolas que respetan la tierra y buscan la máxima calidad. Aunque la certificación ecológica de nuestras almendras está en proceso y hará que la primera producción certificada estará disponible en la próxima cosecha del año 2025, trabajamos desde el inicio bajo el principio de sustentabilidad, conservando el equilibrio entre la producción y la biodiversidad natural.
Un compromiso con la naturaleza y la tradición
En Finca Valdelapiedra, cada almendra y cada garbanzo y producción cuentan una historia: retomar la de una familia comprometida con la tierra, con la calidad de sus productos y con la conservación de un entorno natural único. Queremos que nuestros clientes sientan esa conexión con nuestra finca, desde las flores de los almendros hasta el horizonte y el sol que se pierde en la silueta del paisaje ondulado.